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5 dic 2010

Una nueva cultura juvenil

Llámese freaks, underground, defensores de la contracultura, hijos de las flores o hippies. Todas las etiquetas se quedan cortas cuando se trata de describir a la nueva cultura juvenil de los sesenta que transformó la vida en occidente tal como la entendíamos e introdujo un espíritu de libertad, esperanza, felicidad, cambio y revolución.
Sus primeros pasos fueron modestos e inspirados por la generación beat de los años cincuenta.
 


Los hippies abominaban del aburrimiento de la sociedad consumista de la América de los años cincuenta, y ofrecían una alternativa a la costumbre, entonces generalizada, de vivir en urbanizaciones idénticas, dormir en camas dobles, conducir coches virtualmente iguales, ver series de televisión aburridas, o espiar por el ventanal del comedor para ver el ventanal del vecino.
Los jóvenes miraban a su alrededor y veían que todo lo controlaban los adultos, esos hipócritas que pretendían mantener el status quo como si la Segunda Guerra Mundial no hubiese existido. Los cambios en Gran Bretaña llegaron mediante la oposición organizada contra las armas nucleares en la Campaña de Pro Desarme Nuclear, mediante el crecimiento del rock ”n” roll autóctono y, por supuesto, mediante el consumo de drogas, que enfrentaron a los jóvenes con la generación de sus padres y las autoridades.
La campaña contra las armas nucleares nunca caló en los Estados Unidos, pero, sin duda, la oposición a la guerra de Vietnam sí, y hasta al fondo. Sin embargo, no debemos caer en el error de considerar el movimiento pacifista, o sencillamente “el movimiento”, como muchos lo llamaban, una mera propuesta juvenil.


El movimiento pacifista y los hippies

A partir de finales de la década de 1960 y hasta que el último helicóptero americano escapó desde el tejado de la embajada estadounidense, el movimiento pacifista estuvo presente de manera constante. Las protestas se materializaron de diversas formas; entre otras, mediante cartas a los congresistas y presidentes de parte de ciudadanos comprometidos y de agrupaciones parroquiales, o mediante la recogida de firmas para apoyar sus peticiones o de nombres que se anunciaban en la prensa. Se llevaron a cabo muchísimas marchas y manifestaciones. Asimismo se produjo la deserción masiva del ejército. Se dio una desobediencia civil no violenta, que solía desembocar en el uso de gases lacrimógenos y detenciones masivas con la inevitable brutalidad y violencia por parte de la policía; hubo mítines, huelgas, sentadas y ocupaciones

Algunos hippies participaron en el movimiento pacifista, sobre todo después de los disturbios policiales de Chicago de 1968, cuando tantas personas resultaron heridas, pero en general los activistas miraban a los hippies con desdén. No entendían como esos energúmenos podían pasarse la vida tomando drogas, tocando música, meditando y contemplando el vacío mientras la gente era asesinada por su propio gobierno en una guerra encubierta.
Entonces, ¿por qué eran tan importantes los hippies? Porque sólo desmarcándose de la sociedad era alguien capaz de observarla de manera objetiva, de descubrir lo que faltaba y que había que hacer para solucionarlo.
Los hippies fueron demonizados por dejarse ver


Se decantaban por tejidos gastados y blandos, como el raso o el terciopelo, y a menudo optaban por vestidos largos de señora mayor. Cuando querían arreglarse todo valía: ropa hecha a mano con frecuencia teñida con colores terrosos o arco iris psicodélicos y collares hechos a mano. A veces se ponían flores en el pelo.
1965





Los hippies no aparecieron de la noche a la mañana, pero 1965 fue el primer año en el que emergió el movimiento juvenil perceptible.
La mayoría de los grupos de rock “psicodélicos” se fundaron ese año.
Ese fue el año en que se generalizó el consumo de LSD gracias a la gigantesca propaganda mediática.
El ácido todavía era legal, pero las autoridades empezaban a inquietarse y a plantearse como contenerlo. En Londres, por su parte, los Beatles hicieron su primer viaje con LSD y se hartaron de fumar marihuana.
También fue el año en el que Londres empezó a florecer con la apertura de las tiendas de ropa Granny Takes A Trip y Hung On You.
1966






El verano de 1966 fue el verdadero Verano del Amor. Cuando empezó el año los periódicos de underground podían contarse con los dedos de una mano, pero para cuando terminó había más de una docena de periódicos que se publicaban en ciudades de todo el país, incluso había uno en Londres.
Las salas de baile se sirvieron de un nuevo método publicitario: unos posters psicodélicos tan estrambóticos que solo alguien que fuera fumado podía descifrar lo que decían las letras borrosas y danzarinas y entender las referencias indirectas a las drogas.
Fue el año en que el famoso químico clandestino Owsley Stanley III se hizo millonario y su principal producto, el LSD, acabó siendo ilegal.
1967





Éste fue el año del Verano del Amor, pero también vio el principio de una represión política generalizada contra los hippies y la contracultura.
Fue el año que Jimi Hendrix dejó boquiabierto a Londres para luego viajar a los Estados Unidos.
También fue el año de las protestas, porque la presencia de Estados Unidos en Vietnam no dejaba de crecer. La comunidad negra se sublevó y murieron 43 personas, 2.000 resultaron heridas y 5000 se quedaron sin casas en una semana de altercados en Detroit, Michigan.
1968




Fue el año del activismo político y de la violencia, así como el año de la retirada masiva al campo. También fue el año en que una idea comercial y superficial del movimiento hippie se extendió por las afueras y los suburbios y todas las localidades pasaron a tener sus auténticos y genuinos marginados. En toda ciudad importante había una zona hippie, o al menos una calle hippie, pero con los alquileres altos del centro, los hippies tendían a vivir en pisos compartidos que, en muchos casos, se convertían en comunas. Había granjas de subsistencia, comunidades religiosas, comunas de sexo, y grupos de seguidores de distintos gurús. Casi todos llevaban el pelo largo, casi todos fumaban marihuana; para la población en general, todos eran hippies.
1969
http://www.youtube.com/user/Brokentearsfalling?feature=mhum video que muestra los gustos musicales de los jóvenes.





Fue un año de extremos, de violencia y locura pero también de logros y éxitos. La presencia de los Rollings Stones lo condensó todo. Brian Jones tuvo que marcharse del grupo porque su adición a las drogas le hizo imposible seguir el ritmo del grupo. En un concierto en Londres, los Stone tocaron para medio millón de personas. En agosto a pesar de chaparrones, el Woodstock Festival, demostró como debía entenderse el espíritu comunal y a partir de aquella experiencia se creó la llamada “generación Woodstock”.


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